Fernando III El Santo

Fernando III El Santo nace en Peleas de Arriba, Zamora o Bolaños de Calatrava, Ciudad Real el 5 de agosto de 1199. Hijo de Alfonso IX, rey de León y de Berenguela I, reina de Castilla, unificándose estas dos coronas. Pero el Papa Inocencio II anuló el matrimonio por declarar parentesco entre estos dos reyes y Berenguela, tuvo que volver a Castilla, junto a su padre con todos sus hijos.

Al morir el rey Enrique I, nombran a Fernando rey de Castilla, teniéndose que enfrentar a una revuelta por el Reino de León y casándose con Beatriz de Suabia el año 1219. Aprovechando las disputas entre los diferentes reinos musulmanes por las tierras conquistadas en Andújar, Martos y Baeza, Fernando III, mediante una buena gestión de sus tropas logra recuperar dichas tierras andaluzas.

El testamento de su padre no fue respetado por los partidarios de Fernando, reivindicando el reino de León que en un principio había sido adjudicado a las reinas Teresa de Portugal y Berenguela de Castilla, recibiendo estas una compensación económica en lugar de las tierras prometidas se unen dinásticamente con Fernando III en los reinos de León y Castilla.

Fernando III impulsó de una forma rotunda la reconquista de España y aprovechando su superioridad militar recuperó ciudades como Córdoba o Jaén, avanzando por el río Guadalquivir. Sevilla se resistió con mano férrea la actuación de la flota castellana en el Cantábrico, rendiéndose, finalmente, en 1248, tras casi año y medio de asedio y con la ayuda de Ramón de Bonifaz, marino que había formado una flota que retuvo la llegada de ayuda proveniente del enemigo por vía marítima.

Siguieron otras reconquistas en ciudades como Medina Sidonia y Arcos de la Frontera, dejando tras de sí, un fuerte legado de tierras recuperadas de manos del imperio musulmán. Una vez unificados estos reinos, los repartió entre la Iglesia y los nobles e impuso el castellano como idioma oficial en lugar del latín. Siendo también un gran impulsor de la música y la literatura gracias a su padre que, muy interesado en esta segunda disciplina artística, inculcó en su hijo una instrucción ejemplar. Fernando III promovió también, la traducción del Fuero juzgo, libro de leyes escrito en lengua romance, promulgado en la época visigoda.

Fallece el año 1252, mientras se encargaba de acondicionar una expedición contra el norte de África, con el fin de evitar las amenazas de las cuales su reino había sido víctima. Recibe sepultura en la Catedral de Sevilla, tres días después de su fallecimiento.