Ingrid Betancourt

Ingrid Betancourt Pulecio nació en Bogotá, Colombia, el 25 de diciembre del año 1961, y es una reconocida política colombiana.

Hija de Gabriel Betancourt y de Yolanda Pulecio, cursó sus estudios en el Instituto de Estudios Políticos de París (Sciences Po'), en donde eligió la especialización en Relaciones Internacionales y comercio exterior. Vivió casi 30 años en Paris, debido al trabajo de su padre, que era embajador de la Unesco. Fue en ese lugar en donde conoció a Fabrice Delloye, con quien formó matrimonio en el año 1981. Junto a él, tuvo dos hijos, Melanie y Lorenzo. Nueve años más tarde, luego de su regreso a su tierra natal, se divorció en 1990.

A partir de su instancia en Colombia, comenzó a trabajar en la Cámara de Representantes de su país, puesto en el que adquirió mucha experiencia y un gran reconocimiento por parte de sus pares por su lucha en contra de la corrupción política, lo que la llevó a exigir una salida pacífica de los conflictos armados que se estaban desarrollando en sus tierras, por la acción de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), un grupo guerrillero colombiano marxista-leninista, que tiene sus bases en Colombia, Panamá, Venezuela, Ecuador y Perú. Este grupo está considerados por varios países como fuerzas terroristas, utilizando su método de guerrillas, en el que se incluyen asesinato de civiles, miembros del gobierno y militares, además de realizar secuestros extorsivos, atentados con bombas y distintas acciones que obligan a desplazarse forzadamente a los civiles, lo cual atenta contra el Derecho Internacional Humanitario.

En 1994, luego de renunciar al Partido Liberal a causa de su desacuerdo en la crisis conocida como Proceso "ocho mil", en la que se acusó a Ernesto Samper de haber recibido financiación de parte del narcotráfico para su campaña presidencial, se postuló por el Partido verde Oxígeno, para ocupar un lugar en la banca del Senado para las elecciones legislativas del año 1998, en las que fue elegida como la primera mayoría nacional.

En ese mismo año, se casó con Juan Carlos Lecompte, y escribió un libro titulado "La Rage au cœur" (La rabia en el corazón), en el que expone su visión de la corrupción durante el gobierno de Ernesto Samper.

En 1999, consiguió ser nombrada alcalde del municipio de San Vicente del Caguán en Caquetá, lugar en donde parte de la Zona de Distensión para comenzar a mantener distintos diálogos con la guerrilla de las FARC.

En el año 2001, comenzó a hacer campaña para obtener la presidencia de su país en las elecciones del año 2002.

El 23 de febrero de 2002, luego de encabezar uno de los diálogos con las FARC, fue secuestrada junto a Andrés Pastrana y Clara Rojas.
El secuestro la mantuvo 6 años, 4 meses y 9 días en una de las bases del grupo militar en zonas selváticas de Colombia. Durante su cautiverio, el Partido verde Oxígeno, responsabilizó al estado por lo ocurrido, diciendo "Reclamamos al Gobierno que asuma su responsabilidad en la búsqueda de la liberación de Ingrid, no sólo porque es su obligación garantizar el ejercicio de la democracia, sino también porque fue por su negligencia que la candidata tuvo que transportarse por tierra hacia San Vicente del Caguán". Luego de la llamada "Operación Jaque", realizada el 2 de julio del año 2008, Betancourt, junto a otros varios secuestrados, fue liberada por las Fuerzas Armadas colombianas.
Al hablar con la prensa luego de su liberación, declaró: “Se le ha dicho a la opinión pública que fuimos irresponsables, que fuimos imprudentes y que por lo tanto somos culpables de estar aquí secuestrados. Eso es mucha crueldad o mucha ignorancia. Añadir a lo que hemos vivido ese tipo de comentarios”.

Betancourt recibió varias distinciones internacionales por su valentía y gestión por la paz. En el año 2008, fue declarada "Presidenta de honor del congreso internacional de los Partidos Verdes", recibió el "Premio Príncipe de Asturias de la Concordia", la "Legión de Honor francesa en el grado de Caballero", fue declarada nueva embajadora y vocera de los familiares de secuestrados de Colombia, y postulada para el "Premio Nobel de la Paz".

En la actualidad, Ingrid Betancourt decidió retirarse de su vida política, por lo que declaró a los medios: "Creo que la política contamina, le quita pureza a las acciones que uno quiera emprender desde el corazón y rebaja las aspiraciones de servir a los demás. No quisiera estar metida en una contienda electoral. No quiero estar en un espacio donde hay polarización y división."