Randy Foye

Randy Foye es un conocido jugador de basketball de origen estadounidense, famoso por su actual participación junto a los Minnesota Timberwolves de la National Basketball Association.

Randy Foye nació el 24 de Septiembre de 1983 en la ciudad de Newark, localizada dentro del estado de New Jersey, Estados Unidos.

Dentro del campo de juego su posición es la de Point Guard y suele utilizar la camiseta número 4. Su estatura máxima es de 1.93 metros y pesa aproximadamente 97 kilogramos.

A la edad de tres años, Foye perdió a su padre Antonio en un accidente de motocicletas. Solo tres años más tarde, él y su hermano fueron dejados en el jardín de infantes por su madre Regina. Nunca más volvieron a verla.

A pesar de todo esto, su abuela crió a sus dos nietos y junto con  la ayuda de los vecinos les enseñó el deporte del basketball. Randy conserva la esperanza de ver algún día a su madre y por tanto tiene su rostro tatuado sobre el pectoral del corazón.

Durante su adolescencia asistió a la East Side High School dentro de su ciudad natal. Su juego impresionó tanto a los aficionados como a los conocedores, siéndole otorgado durante su último año el premio al New Jersey Player of the Year.

Una vez graduado de la secundaria y con muchas ofertas a su disposición, decidió que la mejor oportunidad se la brindaba la Villanova University por lo que allí se enroló.

Formó equipo con Allan Ray y Curtis Sumpter, con quienes la mayoría de los fanáticos pensaba que los Wildcats alcanzarían un nuevo campeonato luego de mucha sequía.

Y en realidad parte de estas premoniciones o plegarias fue escuchada, puesto que gracias a la capacidad de estos jugadores, Villanova regresó a formar parte de las semifinales del NCAA Tournament.

Su habilidad para realizar tiros es algo que los analistas han estudiado en profundidad, por lo que ha sido catalogado como un jugador único en su especie.

A pesar de tener una estatura bastante precaria entre los Guards, tiene una facilidad impresionante para lanzar tiros completamente solo como al estar fuertemente marcado.

Durante la temporada 2004-05 se alzó con un impresionante promedio de 20 puntos por partido. Uno de sus picos más emotivos fue en la final contra Carolina del Norte, cuando perdieron por un punto a pesar de los 28 que Foye ya había marcado.

Al año siguiente, en el 2006, fue nominado como el Big East Player of the Year, dejando detrás suyo al compañero Allan Ray, al jugador Rudy Gay de la UConn y a Quincy Douby.

Durante el NCAA Tournament 2006 Villanova alcanzó un excelente record de 28 victorias sobre 5 derrotas en las cuales Foye promedió 20.5 puntos, 5.9 rebotes obtenidos, 3.34 asistencias y 1.4 balones robados por partido.

Una vez terminada su carrera en la universidad, fue elegido por los Boston Celtics durante el Draft de la NBA del 2006 en la 7ma posición. Inmediatamente fue transferido a los Portland Trail Blazers quienes a su vez lo endosaron a los Minnesota Timberwolves.

Su año como novato fue realmente complicado por el hecho de que los Timberwolves ya tenían muchos Guards que estaban mucho más establecidos dentro del ámbito competitivo de la NBA.

Solamente logró un promedio de 14 minutos de juego en toda la temporada, lo que en realidad le bastó para mostrar su juego un poco y recibir una mejor atención al año siguiente.

Cuando Allen Iverson demandó un cambio, el nombre Foye era el que más resonaba entre todos los tratos hipotéticos. Su pasado con Villanova estaba enviándolo a los Philadelphia 76ers mientras que su compañero Kevin Garnett estaba ya cansado del equipo.

De esta forma los Wolves decidieron quedarse con quien piensan será la nueva promesa de la NBA y dejaron ir a Garnett hacia los Boston Celtics.

Una vez marchado quien soliera opacarlo, Foye pudo obtener más minutos de juego y por tanto sus estadísticas en las distintas categorías de puntaje subieron proporcionalmente.

Definitivamente su primer año como jugador fue muy bueno, por lo que los directivos de la NBA decidieron incluirlo dentro del NBA All-Rookie Team.

Durante Junio del 2006 una noticia alarmó un poco a los medios, puesto que le fue diagnosticada una enfermedad en verdad poco común: Situs Inversus.

Aquellos con esta condición tienen los órganos internos invertidos respecto de los de una persona normal, por ejemplo: su corazón está inclinado hacia su lado derecho en vez del izquierdo.

Por suerte los médicos dijeron que esta anomalía no tiene por qué ser ningún tipo de problema y le deja las puertas abiertas para ser la estrella que los Wolves desean que sea.