Las dos caras de enero

Impresionado por la belleza de Colette y la riqueza y sofisticación de Chester, Rydal acepta con gusto la invitación a cenar de la pareja. Sin embargo , no todo es lo que parece con las MacFarlands y su exterior afable esconde secretos más oscuros. 

Cuando Rydal visita a la pareja en su exclusivo hotel, Chester lo presiona para ayudar a mover el cuerpo de un hombre aparentemente inconsciente, a quien acusa de haberlo atacado. En ese momento el joven accede, pero a medida que los acontecimientos toman un giro más siniestro Rydal se encuentra cada vez más involucrado y sin posibilidad de liberarse. Mientras tanto, su creciente encaprichamiento con la vulnerable y sensible Colette, desata los celos y la paranoia de Chester, conduciéndolos a una tensa y peligrosa batalla de egos y voluntades.