Gerhard Schröder

Este político alemán nació el 7 de abril de 1944 y su nombre completo es Gerhard Fritz Kurt Schröder. Nació en Mossenberg, una pequeña localidad en Blomberg que está hoy en día dentro de lo que corresponde a Renania-Westfalia del norte.

Proviene de una familia muy humilde y desde niño tuvo que vivir acontecimientos difíciles como lo fue la muerte de su padre mientras combatía en la Segunda Guerra Mundial, cuando su madre se encontraba embarazada, por lo su madre y sus dos hermanas mayores quedaron en estado de indefensión. Más adelante su madre volvió a casarse y de esta unión, Schröder tiene otras dos hermanas y un hermano, pero a pesar de esto, la familia continuó en estado de pobreza.

Por esta circunstancia, rápidamente desde la adolescencia tuvo que entrar a trabajar para ayudar con los gastos de la casa y para que se pudiera pagar sus estudios. Lamentablemente su padrastro tuvo que ser recluido en un sanatorio para tuberculosos y Schröder tuvo que asumir el rol de cabeza de familia.

Trabajó por algunos años como empleado de una ferretería y también se desempeñó como ayudante de obrero de construcción en Göttingen, ciudad en la que logró realizar sus estudios universitarios en la universidad de esa ciudad.

Una vez culminados sus estudios de Derecho, en 1966 empezó a ejercer su profesión de abogado y posteriormente se trasladó a Hannover, en donde empieza a trabajar como abogado en 1978.

En 1963 ingresa al SPD, Partido Socialdemócrata de Alemania y se declara abiertamente de concepción política marxista. Durante la década de los años 70, mientras el canciller Willy Brandt intentaba implementar su famosa Ostpolitik, o política hacia el este, que buscaba el sano y cordial acercamiento en las relaciones de Alemania Oriental y la Unión Soviética, Schröder sentía una profunda admiración por él.

Llegó a ocupar la presidencia de la Juventudes socialdemócratas.

Ya en 1980, la mayoría legislativa de su partido lo elige para que represente al circuito de Hannover, hasta 1989, cuando Schröder es designado como miembro de lo que se llama el Presidium del SPD. En ese entonces y entrando en coalición con el Partido Verde gana las elecciones regionales de la Baja Sajonia, convirtiéndose en jefe de gobierno de ese estado federado. 

Gracias a su exitoso desempeño Schröder es relegido dos veces en ese cargo hasta en 1998 en donde gana por un amplio margen sobre su más inmediato contendor, aun cuando su partido político había perdido las elecciones legislativas en 1994.

En ese año, en 1998, durante las elecciones, es nombrado candidato para la cancillería, emprendiendo una estrategia minuciosa para introducir cambios en su imagen pública, abandonando sus bruscos y toscos modales y dejando salir un carisma que hasta entonces nadie le conocía, que le hace superar a Helmut Khol. 

Presenta su programa de gobierno Salida y Renovación, aliado nuevamente con el Partido Verde, y a través de este programa reforme el código de nacionalidad, el sistema de pensiones de retiro y el sistema de impuestos. Presionado por el Partido Verde, se ve obligado a asumir posiciones de avanzada en el tema ecológica, como por ejemplo en lo concerniente al programa de energía nuclear y el apoyo a nuevas formas de energía renovable.

Durante su gobierno mantuvo una gran colaboración con Francia, dándole continuidad a la unión bipartita que era el motor de la Unión Europea, al lado de Jacques Chirac. A Estados Unidos le dio un decidido apoyo en la acción del derrocamiento del régimen talibán en Afganistán, enviando un grupo importante de soldados.

En 2002 su partido en alianza con los verdes gana las elecciones, pero muy estrechamente, lo que obliga a su gobierno a emprender un riguroso programa de reformas socioeconómicas. Mediante el documento denominado Agenda 2010 modifica leyes en relación al trabajo, la salud, pensiones e inmigración.

A pesar de su siempre posición de apoyo a los Estados Unidos, en 2002 se opone abierta y absolutamente a la invasión de Iraq propuesta por George Bush, lo que provoca un distanciamiento diplomático por más de un año, lo que influye en su relección.

Fue un gran impulsador de las relaciones comerciales con los países árabes e implementó como costumbre visitar a China una vez al año, con fines de cooperación comercial.

Durante las elecciones federales de 2005, cuando todo el mundo lo daba por perdedor, remonta las encuestas y contra todos los pronósticos gana, pero al  obtener cuatro escaños menos que Ángela Merkel, se ve obligado a renunciar a favor de ella.

Desde entonces se mantiene alejado de la política, pero en plena actividad profesional como abogado.