Greta Garbo

Greta Garbo nació el día 18 de septiembre de 1905 en Estocolmo, Suecia, en el seno de una familia con pocos recursos económicos. Por este motivo, al morir su padre cuando ella contaba 14 años, tuvo que dejar el colegio para trabajar, colocándose en unos almacenes. Este hecho, que en principio podía considerarse dramático, fue el que le cambió la vida.

Efectivamente, en los almacenes, debido a su atractivo físico, fue escogida para prestar su imagen para la publicidad de los mismos, siendo llamada para la realización de un corto enseguida que fueron publicadas las fotografías. Después vino otro corto, y Greta, que había descubierto su vocación, consiguió una beca para estudiar arte dramático en Estocolmo.

Su primera oportunidad le llegó en 1924, cuando el conocido director Mauritz Stiller le propuso trabajar en su película “La leyenda de Gosta Berling”. El gran éxito de esta película fue su pase a Hollywood. Greta viajó allí contratada por la Metro Goldwyn Mayer, convirtiéndose ya en sus primeras películas en una estrella del cine mudo.

Al contrario de lo que pasó con otras estrellas, Greta Garbo no tuvo ningún problema para pasar del cine mudo al sonoro. No sólo esto, sino que afianzó mucho más su carrera, rodando diferentes películas que la iban convirtiendo en todo un mito.

Hallándose en la cumbre de su carrera y con tan sólo 36 años, Greta Garbo sorprendió al mundo anunciando su retirada del cine. Se instaló en un apartamento cercano a Central Park y evitó a partir de entonces todo contacto con el mundo del cine o con los medios informativos. En 1954, cuando la Academia le concedió un Óscar honorífico lo rechazó, siendo el motivo, según sus propias palabras, “porque no quería verle la cara a nadie”.

Greta Garbo murió el día 15 de abril de 1990 en Nueva York, debido a una neumonía.

La actriz vivió y murió rodeada por un halo de misterio. Era persona solitaria, que incluso durante los descansos de los rodajes quería que la dejaran sola. Jamás acudía a fiestas ni actos públicos, y, según sus compañeros, la frase que más pronunciaba era: “Quiero estar sola!”.

Pero, pese a que ésta era su voluntad, nunca se la dejó de asediar, especialmente por parte de los periodistas que siempre rodeaban su casa. La actriz llegó a comentar: “Mi vida ha sido una travesía de escondites, puertas traseras, ascensores secretos, y todas las posibles maneras de pasar desapercibida para no ser molestada por nadie"

Nunca consiguió el Óscar, aunque estuvo nominada cuatro veces a la mejor actriz principal por las películas “Anna Christie”, “Romance”, “Camille” y “Ninotchka”.

De entre su filmografía, destacamos sus títulos más conocidos, como “Mata Hari”, “Grand Hotel”, “La mujer divina”, “La dama misteriosa”, “Orquídeas salvajes”, “Tentación” o “Ana Karenina”.