Una de las mujeres cantante de música clásica más conocida en el mundo entero es
Mirian Anderson, contra alto estadounidense que desde muy joven destacó por su armoniosa voz y su vocación para llegar a ser una excelente cantante.
Marian Anderson nació en la ciudad de Filadelfia un
27 de febrero de 1897, su familia era de clase humilde, así que no contaban con los medios para ingresarla a un conservatorio. Se dice que Mirian debió trabajar muy duro para poder comprar su primer violín, su primer trabajo fue limpiando pisos y escaleras de locales.
Ya al cumplir los once años de edad ingresó a un coro de mayores, no pudieron negarse a hacerla participar ya que su voz cautivo a los integrantes y además llegaba con mucha facilidad a las notas altas. Fue en el coro que aprendió las técnicas del canto y junto a otras destacadas cantantes como
Mary Saunders Patterson,
Frank La Farge y
Giuseppe Boghetti quienes la ayudaron en su preparación.
Tanto esfuerzo le da su primer logro que fue el de quedar finalista y ganadora en el concurso de solistas en el Lewisohn Stadium en la ciudad de Nueva York. A partir de allí las cosas fueron más fáciles para Marian que se fue consolidando como solista en los primeros conciertos desde el año 1925.
Mirian recibió la ayuda de notables cantantes que buscaron patrocinar debido a su talento, por ello viaja a Europa donde es becada en la escuela de canto de
Julius Rosenwald, quien la preparó y la hizo participar en varias giras por toda Europa. Su más grande logro fue estudiar y participar en la obra
Carmen de Bizet, allí recibió la ayuda y la dirección de Stanislavsky.
Mirian fue tan querida que su fama y su música la llevaron a actuar para el presidente
Roosevelt, también empieza una gran gira que duró un promedio de tres años. Pero así como su éxito fue notorio también recibió muchos ataques racistas, por ser de raza negra, siempre noto ciertas manifestaciones de rechazo, por este motivo y debido a un ataque racista contra ella y otras cantantes fue la propia esposa del presidente Roosevelt quien encabezó una protesta contra la discriminación a cantantes, actores y personalidades de distinta raza.
Mirian fue considerada la
voz del siglo por Toscanini, quien la considero así por su interpretación sobrecogedora en temas como
La muerte y la doncella,
Lágrimas silenciosas, entre otros temas. Lo más interesante de Mirian es que gracias a sus dotes podía darle a las armonías colocaciones de voz distintas pero igualmente bellas, muchas veces mejor o igual que la habitual.
Luego de muchos éxitos y hasta de establecerse un premio internacional con su nombre, Mirian se despide de los conciertos en 1965, su último concierto lo dio en el
Carnegie Hall de la ciudad de Nueva York. Luego ha recibido una serie de condecoraciones como
La Medalla de la Libertad,
La Medalla de Honor del Congreso y un premio Grammy por su larga trayectoria. Para todos los norteamericanos fue una gran pena y pérdida su muerte un
8 de abril de 1993.