Según lo publicado por el sitio web
Tmz.com,
Lindsay Lohan decidió internarse voluntariamente en una clínica de desintoxicación, ubicada cerca de Los Angeles, en la que tiene planeado quedarse hasta la fecha de su próxima audiencia, el 22 de octubre.
En esta nueva cita ante los tribunales, la actriz podría llegar a ser condenada a 1 año de prisión por haber roto en reiteradas ocasiones las pautas de su libertad condicional.
Cabe recordar que
Lohan había sido condenada en julio a 90 días de prisión por delitos relacionados con las drogas, y aunque en agosto salió de la cárcel y pasó tres semanas en una clínica de rehabilitación (bajo libertad condicional), reincidió nuevamente en sus adicciones, por lo que fue nuevamente condenada luego de que, en uno de los controles antidrogas a los que debía someterse regularemente sin previo aviso, los resultados dieran positivos.