Las dos caras de la verdad

Martin Vail (Richard Gere) es un abogado vanidoso cuya principal meta es lucir bien ante la prensa y el público. Por eso acepta la defensa de un monaguillo (Edward Norton) que parece el principal sospechoso del brutal crimen del arzobispo de Chicago.

Basado en una novela de William Diehl, es un notable ejemplo de la vigencia de ese subgénero que son las "películas de juicios". La intensidad de los interrogatorios, la complejidad de algún personaje y la vuelta de tuerca final, son parte del engranaje que hace de ésta una película totalmente disfrutable y atrapante.

Además de Gere, que está muy bien, hay dos buenas actuaciones de caras nuevas (en su momento): Laura Linney y Norton, nominado al Oscar como Mejor Actor de Reparto por este papel.