Cathy Freeman

Freeman comenzó a competir siguiendo el consejo de su padrastro. A los 17 años ganó una medalla de oro en los Juegos de la Commonwealth de 1990, como miembro del equipo de relevos de 4 × 100 metros y fue nombrada Joven Australiana del Año. En 1992 se convirtió en la primera persona aborigen australiana en competir en los Juegos Olímpicos. Aunque no pudo ganar una medalla, el perfil de Freeman continuó creciendo y atrajo nueva atención a los aborígenes, que históricamente habían sufrido discriminación. 

En los Juegos de la Commonwealth de 1994 obtuvo medallas de oro en las carreras de 400 y 200 metros, estableciendo un récord nacional en los 200 metros a 22.2 segundos, y también ganó una medalla de plata en el relevo de 4 × 100 metros. Una sucesión de impresionantes victorias en 1995, incluida una rara victoria contra la rival Marie-José Pérec de Francia, le valió a Freeman el segundo lugar en el ranking mundial de 400 metros. Ocupó ese ranking el año siguiente, cuando se convirtió en la primera mujer australiana en romper 50 segundos a 400 metros, lo que hizo siete veces en las finales de carrera.

En los Juegos Olímpicos de 1996, en lo que se consideró uno de los mejores enfrentamientos en 400 metros, Freeman y Pérec lideraron la pista y estuvieron codo a codo en la recta final hasta que Pérec superó a Freeman, dejándola con una medalla de plata. La australiana terminó la temporada de 1996 con una serie de victorias en el Gran Premio de 400 metros, y, después de un breve retiro, volvió a entrenarse en 1997 con la marca más rápida en 400 metros del año, cuando registró 49.39 segundos en Oslo en el mes de julio. En los campeonatos mundiales, Pérec no se presentó y Freeman ganó el oro de 400 metros en 49.77 segundos reteniendo su clasificación mundial número uno.

Popular tanto dentro como fuera de la pista, Freeman ganó el prestigioso honor de Australiana del Año en 1998. Dos años más tarde, capturó su segundo título de campeonato mundial en la carrera de 400 metros. Para los Juegos Olímpicos de 2000 en Sydney, fue elegida para encender la llama olímpica durante la ceremonia de apertura, un acto que algunos consideraron como un movimiento hacia la reconciliación aborigen. 

Bajo altas expectativas, Freeman ganó una medalla de oro en los 400 metros. Durante su vuelta victoriosa, llevó la bandera nacional australiana y la bandera aborigen nativa. En 2000 también ganó varios títulos de Grand Prix a 400 metros. No compitió en 2001, pero fue parte del equipo de relevos de 4 × 400 metros que ganó una medalla de oro en los Juegos de la Commonwealth de 2002. Se retiró de la competencia profesional en 2003.

En 2007, Freeman estableció la Fundación Catherine Freeman, una organización sin fines de lucro que se ocupa de los niños indígenas en Australia.