Hugo von Hofmannsthal

A los 16 años publicó sus primeros poemas, bajo el seudónimo de Loris, que produjron un revuelo en Viena y en Alemania por su belleza lírica, evocaciones mágicas del lenguaje y calidad onírica. Su anticipación de experiencia madura y virtuosismo formal parecía increíble en alguien tan joven. Después de un año de servicio militar obligatorio, estudió filología romántica con miras a una carrera académica, pero en 1901 se casó y se convirtió en escritor independiente.

Entre 1891 y 1899, Hofmannsthal escribió varias obras cortas en verso, influenciadas por los dramas estáticos del escritor belga Maurice Maeterlinck, los monólogos dramáticos del poeta romántico inglés Robert Browning y las proverbios dramáticos del poeta francés Alfred de Musset. Estas obras incluyen Gestern (1891; "Ayer"), Der Tod des Tizian (1892; La muerte de Tiziano, 1913), Der Tor und der Tod (1893; La muerte y el tonto, 1913), Das kleine Welttheater (1897; The Little Theatre of the World"), Der Weisse Fächer (1898, traducido parcialmente como The White Fan, 1909), Die Frau im Fenster (1898; Madonna Dianora, 1916), Der Abenteurer und die Sängerin (1899; The Adventurer and the Singer, 1917-18), y Die Hochzeit der Sobeide (1899; The Marriage of Sobeide, 1961). 

De la misma belleza exquisita que los poemas, estos ensayos son reflexiones líricas sobre la apariencia y la realidad, la fugacidad y la atemporalidad, y la continuidad y el cambio dentro de la personalidad humana, temas que constantemente se repiten en sus obras posteriores. 

Después del cambio de siglo, sin embargo, Hofmannsthal renunció a las formas puramente líricas en su ensayo "Ein Brief" (también llamado "Chandos Brief", 1902). Este ensayo fue más que la revelación de una situación personal; llegó a ser reconocido como un síntoma de la crisis que socavó el movimiento simbolista estético de finales de siglo.

Durante un período de reorientación y transición, Hofmannsthal experimentó con las formas trágicas isabelinas y clásicas, adaptando Venice Preserv'd (1682) de Thomas Otway como Das gerettete Venedig (1904) y escribiendo Elektra (1903), más tarde musicalizada por Richard Strauss. Al mismo tiempo, comenzó su novela, Andreas (1932, The United, 1936), que nunca completó. El teatro se convirtió cada vez más en su medio. Al final de su vida colaboró con Strauss, escribiendo los libretos de las óperas Der Rosenkavalier (interpretada en 1911, "El caballero de la rosa"), Ariadne auf Naxos (1912), Die Frau ohne Schatten (1919; "La mujer sin una Sombra"), Die Ägyptische Helena (1928; Helena en Egipto, 1963) y Arabella (realizada en 1933).

Después de la Primera Guerra Mundial, con el productor teatral y diseñador Max Reinhardt, fundó el Festival de Salzburgo, en el que regularmente se han presentado actuaciones de su Jedermann (1911; "Everyman") y Das Salzburger grosse Welttheater (1922; The Great Salzburg Theater of the World, 1963). Sus comedias, Cristinas Heimreise (1910; Christina's Journey Home, 1916), Der Schwierige (1921; The Difficult Man, 1963), y Der Unbestechliche (interpretada en 1923, publicada en 1956; "The Incorruptible"), están escritas en dialecto vienés y ambientadas en la sociedad austriaca contemporánea preocupada por cuestiones morales; estas obras combinan el realismo con el simbolismo oculto.

Las reflexiones de Hofmannsthal sobre la crisis y la desintegración de la civilización europea después de la Primera Guerra Mundial encontraron expresión en su drama político Der Turm (1925, The Tower, 1963) y en varios ensayos que fueron proféticos del futuro de la cultura occidental. Respondió al colapso del imperio de los Habsburgo por una mayor conciencia de su herencia austriaca, al tiempo que se comprometía con la tradición europea. Su arte continuó desarrollándose, y siempre mantuvo la delicada gracia y el sentido de la belleza trascendente típica de sus primeros trabajos, pero fue incapaz de adaptarse al siglo XX.