James Lind

Lind nació en Edimburgo el 4 de octubre de 1716. En 1731, se registró como aprendiz en el Colegio de Cirujanos de Edimburgo y en 1739 se convirtió en ayudante de cirujano, prestando servicio en el Mediterráneo, Guinea y las Indias Occidentales, así como en el Canal de la Mancha. 

En 1747, mientras se desempeñaba como cirujano en el HMS Salisbury, llevó a cabo experimentos para descubrir la causa del escorbuto, cuyos síntomas incluían dientes flojos, encías sangrantes y hemorragias.

Lind seleccionó a 12 hombres de la nave, todos afectados por escorbuto, y los dividió en seis pares, dando a cada grupo diferentes adiciones a su dieta básica. Algunos recibieron sidra, otros agua de mar, otros una mezcla de ajo, mostaza y rábano picante. Otro grupo de dos recibió cucharadas de vinagre, y el último dos naranjas y limones. El grupo alimentado con estos frutos cítricos experimentó una notable recuperación. Aunque no había nada nuevo acerca de su descubrimiento - los beneficios del jugo de limón se conocían desde hacía siglos - Lind logró establecer definitivamente la superioridad de los cítricos por encima de todos los demás 'remedios'.

En 1748, Lind se retiró de la Armada y asistió a la Universidad de Edimburgo para recibir sus cualificaciones profesionales. En 1753, publicó "Un tratado del escorbuto" y en 1757 "Ensayo sobre los Medios más eficaces de preservar la salud de los hombres de mar en el Armada Real', que arrojó mucha luz sobre las pésimas condiciones de vida y la dieta de los marineros. 

En 1758, fue nombrado médico del Hospital Naval en Haslar en Gosport donde investigó la destilación de agua dulce a partir de agua salada para el suministro a los buques.

En 1763, Lind publicó trabajos sobre la fiebre tifoidea en los buques y en la publicación de 1768 "Ensayo sobre Enfermedades incidentes en los europeos en climas cálidos", resumió las enfermedades prevalentes en cada colonia y dio consejos sobre cómo evitar las infecciones tropicales. Lind murió el 13 de julio de 1794 en Gosport.

Aunque la importancia de sus hallazgossobre el escorbuto fueron reconocidas en su momento, debieron pasar 40 años hasta que una orden oficial del Ministerio de marina ordenara el suministro de zumo de limón en los barcos. Con esto, el escorbuto desapareció casi por completo de la Armada Real.