Quiere el divorcio pero quiere también su anillo

Si bien la costosa sortija le podría costar cerca de 2 millones de dólares, Kim Kardashian, que decidió poner fin a su corto matrimonio con el jugador de la NBA, Kris Humphries, está decidida a quedarse con ella. Según lo publicado por el portal TMZ, en el contrato matrimonial de la pareja, la estrella del reality dejó bien en claro que, en caso de divorciarse, ella podría quedarse con el anillo de diamantes si pagaba su precio, que según se filtró, estaría rondando los US$2 millones.  

La morocha, que confirmó el lunes pasado que había presentado una demanda de divorcio contra su esposo, contrató para que lleve a cabo los trámites a la abogada de celebrities Laura Wasser.

Cabe recordar que Kim, de 30 años, y Humphries, de 26, se casaron el pasado 20 de agosto en una deslumbrante ceremonia en California, a la que asistieron 450 invitados, varios de ellos famosos.  Sin embargo, el casamiento terminó siendo un gran negocio para la morocha ya que, si tenemos en cuenta de que el evento costó cerca de 10 millones, pero que durante las durante las diez semanas que duró el matrimonio la pareja reportó ganancias por US$ 18 millones (por contratos en revistas y apariciones en TV). Podemos deducir que cada uno de ellos se quedará con unos 4 millones de ganancia, y de esa forma la actriz tendrá pago su costoso anillo...