Se reabre el misterio sobre la muerte del poeta chileno
Pablo Neruda, quien murió el 23 de septiembre de 1973, 12 días después del golpe de estado de
Augusto Pinochet, a quien fue hostil. Neruda no murió de cáncer de próstata, como dice el certificado de defunción oficial, que la familia nunca creyó.
Esta es la conclusión a la que llegó un panel de expertos internacionales reunidos en Santiago de Chile que dice haber encontrado
"una toxina que nunca se descubrió antes en el análisis de restos, por lo que se necesitan más verificaciones para llegar a una conclusión definitiva. Pero el cáncer debe ser excluido. Esto está claro", dijo el juez Mario Carroza, quien está investigando las causas de la muerte del Nobel de Literatura de 1971.
Neruda, según su familia, habría sido envenenado por la policía secreta de Pinochet, la Dina.
Carroza agregó que "
no podemos todavía llegr a la conclusión de que pudo haber habido una intervención de un tercero (los agentes de Pinochet) pero existe la posibilidad de que esta acción haya sucedido. Tenemos la alternativa de que también pudiese ser una muerte natural si no se confirma lo de la toxina".
El patólogo Aurelio Luna, por su parte, cree que "
si todo sale según lo planeado dentro de un año, tendremos una respuesta cierta sobre el estudio genómico de la bacteria. Si descubrimos que no es natural y se ha cultivado en el laboratorio, entonces nos enfrentaremos con la evidencia de que hubo una "intervención externa", que alguien inoculó la bacteria para matar a Neruda".