Están esperando su tercer hijo de una madre sustituta, pero los tabloides estadounidenses están convencidos de que
Kim Kardashian y
Kanye West ya están completando sus documentos de divorcio.
Parece que, desde que en noviembre de 2016, el rapero había sufrido un ataque de nervios y había terminado en el hospital, las cosas entre los dos ya no habrían vuelto a la normalidad.
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Entre su ego y los continuos cambios de estado de ánimo, Kanye es un desastre -escriben los medios-.
Y Kim ya está estresada por criar a dos hijos y preparándose para recibir al tercero sin necesidad de ser arrastrada al abismo de Kanye. Intentó esforzarse, pero no puede soportarlo más".
Según los mismos medios, Kim querría esperar el nacimiento del niño antes de anunciar al mundo que ha dejado a su marido. Ya se habla de un divorcio de mil millones de dólares, para separar las ganancias del imperio Kardashian de las ganancias musicales de Kanye West.
Mientras tanto, la hermana de Kim, Khloé Kardashian, acaba de confirmar que está embarazada.