American Outlaws

Jesse James (Colin Farrell) y Cole Younger (Scott Caan) regresan a su pueblo natal, Liberty, tras la Guerra Civil americana, dispuestos a continuar con su vida de granjeros.

Pero, a su llegada, se encuentran con un pueblo ocupado por la compañía de ferrocarril, quien obliga a sus habitantes a malvender sus tierras con el apoyo del detective Allan Pinkerton (Timothy Dalton) quien declara "fuera de la ley" a los ciudadanos rebeldes.

Los jóvenes ex-soldados se unen para defender con sus vidas el lugar donde siempre han vivido, formando la banda James-Younger.
Perseguidos por la ley y elevados a la categoría de héroes por el pueblo, se convertirán en una leyenda.