Aristóteles Picho

La muerte del famoso actor Aristóteles Picho ha llenado de nostalgia los teatros y cines de Lima, Perú, lugar que orgullosamente lo vio nacer en un pequeño poblado de la región de Huancayo en 1957 y que hoy tan sólo hace unos días lo despidió el pasado 21 de diciembre de 2013.

Aristóteles vivió su infancia como un típico niño de provincia, rodeado de la naturaleza y de una vida mucho más apacible que en la ciudad. Vivió con sus padres y sufrió también del miedo cuando las épocas de terrorismo aún dañaban al Perú. Cuando terminó la secundaria decidió viajar a Lima a probar suerte, su sueño de viajar a la capital y estudiar actuación se volvió realidad al poco tiempo de establecerse en Lima, cuando se inscribió en un taller de actuación

Sus estudios de arte dramático los cursó en la Escuela de Arte Dramático de Lima, su desempeño lo llevó rápidamente a recibir papeles para el cine y su físico de rasgos claramente andinos lo ayudan a encajar en los papeles que se le daban. Su primera y notable participación fue en la película La ciudad y los perros del célebre escritor Mario Vargas Llosa, allí obtuvo el papel de El Boa y fue dirigido por Francisco Lombardi.

Le seguirían éxitos de cine nacional como Alias la gringa y la película La boca del lobo. Sus mejores trabajos los realizo en el film Reportaje a la muerte y en la película la vida es una sola. Pasados unos años Aristóteles sintió el deseo de extender sus conocimientos actorales a jóvenes que como él deseaban ser actores, así que se inició impartiendo talleres y capacitando a jóvenes. Para el año 1999 actuó en películas realizando roles más cortos como en Pantaleón y las visitadoras, en donde hizo el papel de periodista llamado el Sinchi y un corto papel en la película Coraje.

Para el año 2000 su éxito aumentaría, tal es así que participó en la película estadounidense Prueba de vida y en la producción nacional Balearía. Unos años más adelante Picho estaría escribiendo y dirigiendo cortos como “Besando a tu papa” y la mini serie “Sally, la muñequita del pueblo”.

Una de sus más recientes participaciones fue en la última versión de la miniserie “La Perricholi”. Al poco tiempo de terminada la filmación sufrió unas fiebres muy altas producto de una bronquitis, la fiebre le produjo problemas en la medula espinal y poco a poco se fue deteriorando hasta llegar a tener que movilizarse en una silla de ruedas pues las complicaciones en la medula le impedían movilizar las piernas.

Continúo como maestro de artes escénicas en la Universidad de Lima y dramaturgia en la Universidad Católica. Cansado de luchas contra su mal, que poco a poco le impedía valerse por sí mismo, dejó la actuación y se dedicó solo a enseñar.

Para 2013, su corazón también había empezado a detectar problemas, hasta que un 21 de diciembre muere víctima de un ataque al corazón mientras dormía.