Daniela Sarfati

La actriz peruana Daniela Sarfati Páez nació en la ciudad de Lima el 20 de marzo de 1974. Desde muy pequeña demostró tener dotes artísticas y luego de aparecer en algunos comerciales de televisión, se hace integrante del grupo musical del programa Aplausos en 1993. Tiempo después, se convierte en Cíndela del programa infantil Nubeluz, iniciando así su carrera en la televisión.

Convencida de que lo suyo era la actuación, estudia en varias escuelas como la de Alberto Ísola y Aristóteles Picho, incluso viajó a Colombia y hace talleres con Alejandra Borrero. Con estudios y cierta experiencia en la interpretación, Daniela participa en teleseries juveniles como Malicia, Obsesión, Escandalo, Girasoles para Lucía y Torbellino.

Llena de talento, queda seleccionada para ser parte del film Bala Pérdida que dirigió Aldo Salvini, y luego regresa a la televisión en la serie Éxtasis.

En el teatro también ha participado y en 2001 se convierte en la protagonista del musical La Vaca, la Capa y la Zapatilla. Dos años más tarde, sigue en el teatro con la obra infantil Charlie y la fábrica de chocolates, participa además en el musical Ángeles y El jardín de los cerezos.

Nuevamente en la pantalla chica, Daniela vuelve a formar parte del elenco de telenovelas como Besos Robados y Eva del Edén, para a la par seguir en el teatro con Cristo Light, y la reposición de la obra Charlie y la fábrica de Chocolates.

Aunque en su mayoría Daniela siempre ha desempañado papeles de bondadosa, en el 2006 recibió uno opuesto al ser la antagónica en la telenovela Amores como el nuestro.

Decidida a continuar con su carrera en la televisión, estuvo en la serie Así  es la vida del 2008 y continuo con Al Fondo hay sitio, otra serie de América Televisión, interpretando a Susú Ferrand hasta el 2011.

Daniela siempre muy solidaria y decidida a dar ayuda social, fundo en el 2005 la ONG Anidarte, dedica a brindar ayuda a niños en situación de extrema pobreza a través del desarrollo de su talento como actriz.

En el 2006 contrajo matrimonio con el también actor Oscar López Arias con quien tiene a su único hijo llamado Facundo. Pero a mediados del 2013, se hizo pública su separación.

Otra de sus participaciones en el teatro ha sido la obra El celular de un hombre muerto, y en el espectáculo infantil que se celebró como parte del vigésimo aniversario de Nubeluz, llamado ¡Grántico, palmani, zum!

En el 2012 concursó en el reality show de baile El gran Show, y posteriormente, estuvo en la miniserie Mi amor, el wachimán en sus temporadas.