Ezra Pound

Ya en 1898 había realizado un viaje a Europa con la familia, regresando deslumbrado y entusiasmado acerca de las maravillas que del Bel Paese.

Se inscribió en la Universidad de Pennsylvania, estudió las lenguas romance y descubrió los poetas provenzales a los que posteriormente les dedicó numerosos estudios y traducciones. En 1906 obtuvo una beca que le permitió viajar de regreso a Europa, donde, además de visitar nuevamente su amada Italia, también recorrió España.

De vuelta en Estados Unidos le esperaba una desagradable sorpresa: no le renovaron la beca. Después de cuatro meses en la docencia como profesor de literatura española y francesa en la Universidad de Indiana, fué invitado a renunciar, debido a que su estilo de vida se consideraba demasiado fuera de las reglas.

En 1908 se embarcó de nuevo por Europa, con poco de dinero en el bolsillo, una decisión dictada no sólo por necesidad, sino también como una forma de vida. Pound era de la opinión de que para dar lo mejor era necesario restringirse y que para viajar todo debía caber en no más de dos maletas. Una vez en Europa visitó los principales centros culturales: Londres, París, Venecia. Finalmente publicó su primer libro de poesía. Pero para Pound, esto  no era sufiiciente. Conoció y ayudó en todos los sentidos  a artistas de todoss los sectores, incluyendo los músicos.

Pound fue también un innovador. En 1913 la viuda del gran filólogo Ernest Fenellosa le confió los manuscritos de su marido, el principal estímulo para su acercamiento al chino, que lo llevaía a la transposición de varios poemas de esa tierra lejana. En 1914 se convirtió en secretario del poeta irlandés Yeats, otro gigante del siglo XX y un defensor incansable de James Joyce. Mientras tanto, su atención poética se centró en el desarrollo de los que se convertirirían en los legendarios "Cantos" (o "Cantos pisanos").

En 1925 se traslada de París a Rapallo donde residió hasta 1945 dedicándose a la redacción de los "Cantos" y a las traducciones de Confucio. En los años 1931 y 1932 intensificó sus  estudios sobre economia y su polémica contra las maniobras económicas internacionales.

En 1941, al ver obstaculizado su regreso a los Estados Unidos, permaneció en Italia donde, entre otras cosas, mantuvo una famosa serie de discursos en la radio, a menudo retomando el tema de las conferencias ya dadas en la Universidad Bocconi de Milán, en las que hacía hincapié en la naturaleza económica de las guerras.

Como era de esperar en la atmósfera enrarecida reinante, esos discursos fueron apreciadas por algunos, mientras que otros lo hostigaron. El 3 de mayo de 1945, dos partisanos lo llevaron detenido al comando aliado, y desde allí, después de dos semanas de interrogatorios, fue trasladado a Pisay entregado a la policía militar.

Durante tres semanas estuvo encerrado en una jaula de hierro, expuesto al sol durante el día y a los focos de los reflectores en la noche. Luego fue trasladado bajo una carpa y se le permitió escribir. Aquí terminó de componer  los "cantos pisanos".

Fue entonces trasladado a Washington y declarado traidor; se solicitó para él la pena de muerte. En el proceso fue declarado demente y encerrado durante doce años en la cárcel psiquiátrica de Santa Isabel.

Comenzaron a circular peticiones de escritores y artistas de todas partes del mundo y fueron cada vez más insistentes las protestas contra su detención. En 1958 fue liberado y se refugió la casa de su hija en Merano.

En todo el mundo se multiplicaron las ediciones de su "Cantos" y fué invitado a participar en numerosas actividades artísticas y literarias, exposiciones, conferencias internacionales, y recibido con todos los honores.

El 1 de noviembre 1972 Ezra Pound murió en su adorada Venecia, donde descansan sus restos