François Hollande

Hollande pronto se interesó en la política y, mientras seguía siendo estudiante, se ofreció como voluntario para la inexitosa segunda campaña presidencial de François Mitterrand. Cinco años más tarde, en 1979, se unió al Partido Socialista. Para entonces, Mitterrand había sido elegido presidente en su tercer intento, y nombró a Hollande consejero económico menor. Ocupó este puesto hasta que fue a trabajar para Max Gallo, el secretario de prensa del ex primer ministro Pierre Mauroy.

Hollande empezó a servir en el Ayuntamiento de Ussel en 1983 y fue elegido para la Asamblea Nacional en 1988. Aunque perdió su escaño en 1993, lo retomó en 1997. Ese mismo año, Lionel Jospin lo llamó para presidir el Partido Socialista. Hollande fue elegido alcalde de Tulle en 2001 y ocupó el cargo hasta 2008.

En marzo de 2011, Hollande anunció que sería candidato por el Partido Socialista para la presidencia. Se enfrentó a otros cinco candidatos en la primaria, entre ellos Ségolène Royal y el líder Director Gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn. Cuando Strauss-Kahn fue arrestado en Nueva York por cargos de agresión sexual, Hollande comenzó a liderar las encuestas. Ganó la nominación del partido el 16 de octubre de 2011. El siguiente enero, esbozó una lista de las políticas que buscaría promulgar si era elegido, incluyendo aumentar impuestos sobre corporaciones, reducir la edad de retiro, establecer un banco de inversión pública para promover la industria francesa y otorgar derechos de matrimonio y adopción a parejas del mismo sexo.

El presidente Nicolas Sarkozy anunció que buscaría la reelección en febrero de 2012 y rápidamente comenzó a criticar las propuestas de Hollande, alegando que serían desastrosas para la economía. Las encuestas inicialmente mostraron una carrera pareja, pero Hollande le adelantó cómodamente en la segunda vuelta. Ganó las elecciones presidenciales de Francia el 6 de mayo de 2012 y juró el 15 de mayo. Fue el primer candidato en 31 años en destituir a un presidente en funciones después de un solo mandato.

Hollande sumó varias victorias a principios de su mandato como presidente. En 2013, respaldó la intervención militar en Malí y en la República Centroafricana, y cumplió su promesa de legalizar el matrimonio y la adopción de parejas del mismo sexo. Cerró el año con el paso exitoso del llamado "impuesto al millonario" para combatir los salarios crecientes, y siguió con el "pacto de responsabilidad" para extender los incentivos fiscales a las empresas.

Sin embargo, en ese momento su índice de aprobación ya estaba disminuyendo, y una serie de ataques terroristas en suelo francés, comenzando con los asesinatos en enero de 2015 en la oficina parisina de la revista satírica Charlie Hebdo, fomentaron más disturbios. Después del más grande ataque coordinado contra París en noviembre, que dejó 130 muertos, Hollande intentó despojar a los terroristas condenados que tenían doble ciudadanía de su nacionalidad francesa, un movimiento que fue criticado por miembros de su propio partido.

Mientras tanto, las medidas para reactivar la economía encontraron resistencia. La "Ley Macron", nombrada por el ministro francés de Economía, Emmanuel Macron, fue aprobada en julio de 2015 tras la invocación de una cláusula que pasaba por alto el Parlamento. Un proyecto de ley pro-empresarial, seguido nuevamente sin voto parlamentario, fue recibido con protestas generalizadas después de su discución en julio de 2016.

El mes siguiente, se anunció que la tasa de desempleo de Francia había bajado por debajo del 10 por ciento por primera vez desde 2012, pero las buenas noticias hicieron poco para mejorar las calificaciones históricamente bajas de Hollande. El lanzamiento en octubre del libro Un presidente no debería decir eso..., que incluía los comentarios incendiarios de Hollande sobre el poder judicial y los musulmanes, trajo consigo una vergüenza adicional para el presionado presidente.

En diciembre, Hollande anunció que renunciaría a postularse para un segundo mandato con la esperanza de que beneficiaría tanto a su partido como a su país en un momento de creciente sentimiento nacionalista. 

En su vida personal, mientras estudiaba en la Ecole Nationale d'Administration, Hollande conoció y comenzó a salir con Ségolène Royal. Vivieron como pareja pero no se casaron, aún teniendo cuatro hijos juntos. Royal tenía aspiraciones políticas propias y, en 2007, corrió a la presidencia contra los deseos de Hollande. Unas semanas después de su derrota, la pareja anunció su separación.

Unos días después de hacer el anuncio, Royal publicó un libro acusando a Hollande de tener un romance con Valerie Trierweiler, una periodista política de Paris Match. Hollande admitió el asunto, y la pareja se hizo pública con su relación.

En enero de 2014, las fotos publicadas en la revista Closer mostraron supuestamente a Hollande llevándola en un scooter a un apartamento en París que había sido recientemente prestado a la actriz francesa Julie Gayet, revelando su romance secreto. Hollande y Trierweiler se separaron posteriormente, y la periodista publicó un libro sobre todo el tiempo que estuvieron juntos.