Lauretta Bender

Según el propio relato de Bender, ella superó la formidable desventaja de la dislexia en sus primeros años escolares para graduarse como la mejor alumna de su clase en la escuela secundaria y luego obtener una licenciatura (1922) y maestría (1923) de la Universidad de Chicago, y un doctorado en medicina de la Universidad de Iowa (1926). 

Pronto se distinguió en su trabajo, desarrollando la prueba motora Bender-Gestalt en 1923. Bender realizó pasantías y residencias en el Hospital Billings de la Universidad de Chicago, el Hospital Psicopático de Boston, la Universidad de Ámsterdam y el Hospital Universitario John Hopkins. Se asoció con el Dr. Samuel T. Orton y, en 1926-1927, una beca Rockefeller la llevó a Holanda. 

Después de su regreso a los Estados, trabajó en el Hospital Psicopático de Boston con C. Marfie Campbell y Karl M. Bowman. En este momento, Bender se enteró de la obra de Paul Schilder (1886-1940), que se convertiría en la figura más importante de su vida. Schilder, psiquiatra vienés de origen judío, recibió su título de doctorado en la Universidad de Halle en 1911 y ya era una figura reconocida en la psiquiatría. En algún momento asociado de Sigmund Freud, se había desempeñado como médico en el ejército austriaco durante la Primera Guerra Mundial y había enseñado y practicado en el Hospital Universitario de Viena desde 1918 hasta 1928. 

En 1929/30, cuando Bender trabajaba en la Clínica Psiquiátrica Henry Phipps, del Hospital Universitario Johns Hopkins con Adolf Meyer, conoció a Schilder, quien recientemente había emigrado a los Estados Unidos. Esa reunión tuvo lugar, según sus palabras, "el 2 de enero de 1930, en la Clínica Phipps, en una conferencia de personal en la biblioteca de la Universidad. Supe de inmediato que este era el hombre que había estado buscando". En abril, cuando Schilder abandonó Maryland para trabajar en el Hospital Bellevue, resolvió seguirlo. Se postuló para un puesto en Bellevue ese verano y comenzo a trabajar como psiquiatra en el hospital, en el otoño de 1930. Seis años después, contrajeron matrimonio. Pero este nuevo matrimonio no iba a durar mucho tiempo. Schilder murió en un accidente automovilístico solo cuatro años después, dejando a Bender con tres hijos pequeños para criar. 

Entre los efectos importantes de sus años de interacción con Schilder en Bellevue se encuentran su desarrollo de importantes teorías holísticas relacionadas con la psiquiatría infantil, campo de la psiquiatría en el que habría de desempeñar un papel importante en los años posteriores. 

Además de su servicio activo a tiempo completo en Bellevue y Creedmoor, Bender escribió prolíficamente, participó en una amplia gama de actividades profesionales, se desempeñó como asesora de comités gubernamentales y apoyó a muchas organizaciones dedicadas a niños con enfermedades mentales. 

En 1956, después de 26 años de servicio distinguido en Bellevue, donde se convirtió en psiquiatra principal a cargo de la sala de niños, Bender fue nombrada Directora de Investigación de la nueva Unidad de Niños en el Hospital Estatal de Creedmoor, y por lo tanto, se le dio la oportunidad de embarcar sobre lo que ella describió "como el trabajo de mi vida". Se retiró de Creedmoor en 1968, pero continuó trabajando para el Estado de Nueva York hasta 1973. En 1965, se casó con Henry Benford Parkes, profesor de Historia en la Universidad de Nueva York. Después de la muerte de Parkes en 1973, se mudó a Annapolis, hogar de su hijo Peter Schilder, y murió allí en un hogar de ancianos en 1987.