La controversial actriz de Hollywood,
Lindsay Lohan, el día de ayer cuando estaba saliendo del lugar de moda de Beverly Hills,
“Madeo”, fue literalmente cegada por los flashes.
Los destellos de los flashes y las luces, fueron tan fuertes y constantes, que
Lindsay comentó:
“No veo dónde está mi carro”.
Un amigo que le hacia compañía a la actriz, frustrado comenzó a gritarles y a lanzarles objetos a los paparazzis.
La situación estaba tan descontrolada, que
Lohan terminó entrando en el carro de otra persona, donde tuvieron que evadir de nuevo a los fotógrafos hasta llegar a su verdadera camioneta negra.