Un traje de baño "solidario".

Una vez más se subastará la pieza que se olvidó la actriz Nicole Kidman durante un viaje a Suecia. El dueño quiere ganar al menos "cinco vacas" para fines solidarios

Un traje de baño que Nicole Kidman se dejó olvidado en una piscina cuando se encontraba rodando en Suecia será subastado por tercera vez con fines benéficos.

El actual dueño quiere financiar con las ganancias "al menos cinco vacas" para un proyecto de ayuda al desarrollo en India.

Kidman lució el traje de baño negro, de una pieza, en 2002 en la piscina local de la pequeña ciudad sueca de Vänersborg cuando se encontraba en Suecia para rodar la película "Dogville".

Para poder nadar sin ser molestada, Kidman había alquilado la piscina para ella sola. Por eso, el bañero no tuvo dudas acerca de a quién pertenecía el traje de baño cuando lo encontró.

Cuando fracasaron todos los intentos de devolvérselo a su dueña, el traje fue subastado por una radio por 30.000 coronas (unos 5.000 dólares) a beneficio de un fondo para niños con cáncer en Suecia.

Poco después volvió a ser subastado y recaudó 5.500 coronas para el Ejército de Salvación.

La oferta mínima aceptada en la tercera subasta es de 9.000 coronas.