Alan Taylor

Después de haber estudiado en la escuela de cine, comenzó su formación profesional, debutando como director con el cortometraje "That Burning Question" (1990), que también escribió. En 1995 hizo su debut como director de un largometraje, con la comedia agridulce "Palookaville", película premiada como mejor ópera prima en el Festival de Cine de Venecia. Es una historia, inspirada en tres relatos de Italo Calvino, sobre tres jóvenes estadounidenses desempleados, matones y cobardes, que se aventuran con torpeza en dos asaltos, pero luego son recompensados ​​por una buena acción. 

Dspués de esta primera positiva experiencia, Taylor se dedicó a la televisión. Entre 1996 y 1997 dirigió algunos episodios de la serie de televisión canadiense "Traders", que explora la vida, los amores y las estrategias de un equipo profesional de inversores en Toronto. Inmediatamente después fue contratado por el la televisión de cable estadounidense HBO, para dirige dos episodios de "Oz" (1997-1998), serie que narra la vida de los presos y guardias en una prisión de máxima seguridad. 


Luego de dirigir varios episodios de la serie "Homicide" (1996-1999), que sigue el trabajo de una ficticia Unidad de Homicidios del Departamento de Policía de Baltimore, Taylor participó en algunas de las más interesantes producciones televisivas americanas de finales de los noventa. Comenzando con dos episodios de la serie "El ala oeste de la Casa Blanca (The West Wing)" (1999-2000), para luego dirigir seis episodios del fenómeno televisivo "Sexo en Nueva York" (1999-2003), que narra con ironía la vida emocional y sexual de cuatro profesionales establecidas en moderna y exclusiva ciudad de Nueva York. 

Después de dirigir un episodio de la serie "Six Feet Under (A dos metros bajo tierra)" (2002), el director continuó con dos episodios de "Deadwood" (2004-2005); seguidos por un episodio de "Perdidos (Lost)", una de las producciones más caras de la historia de la televisión, así como auténtico fenómeno de masas. 

Taylor también puso su firma en otra serie de culto como es "Los Soprano" (20006-2007), que describe la vida de una familia de la mafia italo-americana. La dirección de los nueve episodios de la serie creada por David Chase le valió un Premio Emmy 2007 a ​​la mejor dirección en una serie dramática de televisión. 
Después dirigir un episodio de la serie de suspenso legal "Ley y orden (Law & Order)" (2008), Taylor se abocó a otro gran éxito, "{@pelicula:Mad Men (2007-2008), una serie ambientada en una agencia de publicidad de Nueva York en los años '60s, de la que también dirigió el episodio piloto , "Smoke Gets in Your Eyes", y por el que recibió una nominación a Mejor director en los Premios Emmy de 2008.

De 2009 a 2010 dirigió varios episodios de "Bored to Death"; un episodio de "Boardwalk" e HBO (2010); y el episodio piloto de "The Playboy Club". 


De 2011 a 2012 fue contratado por el director de la serie de fantasía "Game of Thrones", adaptación televisiva del ciclo de novelas "Canción de Hielo y Fuego" de George RR Martin, que cuenta la lucha entre distintas familias, para conquistar el trono de un mundo imaginario. 

Paralelamente a su carrera televisiva, Taylor también se dedicó a su primer amor, el cine. En 2001 dirigió la comedia "Mi Napoleón"; en 2003, fue el turno de "Kill the Poor" , drama ambientado en Alphabet City, un área de Manhattan centro del narcotráfico en los años ochenta. 

Gracias a su experiencia con la serie "Game of Thrones", en 2013 Taylor llegóa importante acuerdo con Marvel Studios, para dirigir "Thor: El mundo oscuro", segunda entrega de la película de superhéroes protagonizada por Chris Hemsworth.  

Actualmente se encuentra trabajando en otro film de acción y ciencia ficción, nada menos que "Terminator: Genesis", una precuela de la historia del famoso cyborg del futuro. El film cuenta con guión de James Cameron y su elenco estará encabezado por Emilia Clarke, Jai Courtney y Arnold Schwarzenegger.

En su vida personal, Taylor está casado con la artista de maquillaje Nicki Ledermann; ambos tienen tres hijos.