Francesco Petrarca

Petrarca se convirtió en clérigo, lo que le permitió escribir distintas publicaciones eclesiásticas y sostenerse con ellas mientras seguía su pasión por la literatura antigua. Viajando como enviado diplomático de la Iglesia, fue capaz también de buscar textos clásicos olvidados. A lo largo de su vida, Petrarca amasó una impresionante colección de este tipo de textos, que luego donó a Venecia a cambio de una casa, huyendo de la plaga.

A medida que aprendía más sobre la época clásica, empezó a venerar más esa época y frustrarse por las limitaciones de su propio tiempo. A pesar que sentía que vivía "en medio de variadas y confusas tormentas", Petrarca creía que la humanidad podría una vez más llegar a las alturas de los logros del pasado. La doctrina que defendía llegó a ser conocida como humanismo, y formó un puente entre la Edad Media y el Renacimiento.

La otra pasión de Petrarca era la escritura. Sus primeras piezas fueron poemas que compuso después de la muerte de su madre. Continuó escribiendo sonetos, cartas, historias y más. La escritura de Petrarca fue muy admirada durante su vida, y fue coronado poeta laureado de Roma en 1341. La obra a la que Petrarca tenía en más alta estima fue su composición en latín, África, un poema épico sobre la Segunda Guerra Púnica. Sin embargo, sus poemas vernáculos lograron mayor renombre, y más tarde ayudarían a crear la lengua italiana moderna.

Las composiciones vernáculas más conocidos de Petrarca fueron poemas líricos sobre Laura, una mujer por la que había caído en un amor no correspondido después de verla en una iglesia de Aviñón, el 6 de abril de 1327. Petrarca escribió sobre Laura -cuya verdadera identidad nunca ha sido verificada-, la mayor parte de su vida, incluso después de que ella muriera durante la Peste Negra de 1348. Cuando compiló 366 de sus poemas en lengua vernácula en su Rerum vulgarium fragmenta - más conocido como Canzoniere de Petrarca (cancionero de Petrarca) - su amor por Laura era uno de los temas principales. 

La colección también contiene 317 sonetos; Petrarca fue uno de los primeros practicantes de esta forma de poesía y ayudó a popularizarla.

Petrarca falleció justo antes de su cumpleaños número 70, en Arqua (cerca de Padua), Carrara. Después de retirarse a trabajar en su estudio el 18 de julio, 1374, murió durante la noche. Su cuerpo fue descubierto a la mañana siguiente.

Como uno de los primeros estudiosos clásicos del mundo, Petrarca reveló vastas reservas de conocimiento perdido en los textos que descubrió, mientras que su filosofía del humanismo ayudó a fomentar el crecimiento intelectual y los logros del Renacimiento. Su legado también incluye poemas, sonetos y otros escritos. Su escritura vernácula fue inmortalizada cuando fue utilizada junto a las obras de Dante Alighieri y Giovanni Boccaccio, como la base de la lengua italiana moderna.