El dramaturgo español
Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza (1581-1639) fue una importante figura del Siglo de Oro español. Su obra se caracteriza por el dominio del diálogo humorístico y el uso de una tesis, o premisa básica, para satirizar las debilidades humanas comunes.
Juan Ruiz de Alarcón nació en México en el seno de una distinguida familia española. Fue educado en México y en España y obtuvo dos títulos en leyes. Volvió a España en 1614 y se convirtió en autor teatral, y fue allí donde obtuvo la mayor parte de su éxito.
Quizás el origen colonial de Alarcón y sin duda su defecto físico (era jorobado) inspiraron las monstruosas burlas dirigidas a él, como "camello enano", "mono" y "poeta tronco". Aunque Alarcón respondía con igual genio, su amargura se volcaba en sus obras, con personajes que carecían de gracia física, pero eran poseedores de una fuerza moral impresionante. Al mismo tiempo, varios de sus personajes físicamente atractivos quew provocaban desaprobación debido a algún defecto moral.
Alarcón escribió menos de 30 obras de teatro, todas en verso. A pesar de su producción, relativamente pequeña, se encuentra entre los mayores genios cómicos europeos de su época. Su obra más famosa es La verdad sospechosa, que el dramaturgo francés Pierre Corneille adaptó y en parte tradujo literalmente como Le Menteur (1644). La verdad sospechosa cuenta la historia de un graduado universitario, joven y agradable que es, en el sentido del siglo XVII, un caballero completo a excepción de un defecto moral notable: la mentira compulsiva. Partiendo de allí, Alarcón desarrolla múltiples situaciones que ofrecen un chispeante entretenimiento pero que señala una posición moral.
Muchos de sus protagonistas tienen una pasión dominante, una convención adoptada por el dramaturgo francés Molière, por ejemplo en El avaro. Una obra temprana de Alarcón, No hay mal que por bien no venga, presenta a un protagonista para el que la comodidad es el motivo de cada decisión o acción, ya sea importante o trivial, excepto en cuestiones de honor. En Mudarse por mejorarse, el indeciso Don García pierde el amor de la bella y rica Clara, debido a su vacilación entre ella y su sobrina.
De vez en cuando Alarcón comenzaba escribiendo sus habituales tésis. Luego abandonaba su moderación habitual por un estilo más exuberante, como en El anticristo y la segunda parte de El tejedor de Segovia.
Juan Ruiz de Alarcón y Mendoza falleció en Madrid el 4 de agosto de 1639; fue enterrado en la parroquia de San Sebastián.