Manuel I El afortunado

Décimo cuarto rey de Portugal. Era conocido como El Afortunado. Tomó el poder en 1495, sucediendo a su primo Juan II el Príncipe Perfecto. Lo de "El Afortunado" fue por sus grandes logros y acciones realizas durante su reinado. Uno de ellos fue el descubrimiento de la ruta Atlántica hacia las Indias por el cabo de Buena Esperanza. Asimismo el descubrimiento de Brasil.

Durante su reinado se produjeron los siguientes acontecimientos: Vasco de Gama descubre la ruta Atlántica hacia la India (1498), Pedro Alvares Cabral descubrió Brasil (1500), Francisco de Almeida se convirtió en virrey de la India (1505) y El Almirante Alfonso de Albuquerque aseguró el monopolio del Océano Atlántico y el golfo Pérsico (1504-1511).

Todo esto hizo que Portugal se volviera uno de los países más ricos y poderosos. Tuvieron además convenios comerciales con China y Persia.

Con el propósito de captar a los científicos y artistas de su tiempo, tomó gran parte de sus riquezas y mandó construir grandes edificios que posteriormente se les conoció como de estilo manuelino. Resaltando entre ellos el Monasterio de Jerónimos y la Torre de Belem.

Se casó con la Infanta Isabel de Aragón. No obstante, dicha unión fue vista como arreglo político. Los reyes de Castilla, Aragón y Portugal, por mucho tiempo querían que la Península Ibérica fuese unificada. Por lo cual, se dice que ello motivó la unión entre el Infante Alfonso y la hija de los Reyes Católicos.

Cuando falleció Alfonso, Manuel tuvo que heredar no solo la corona, sino también sus deberes. De aquel matrimonio nació Miguel, a quien llamaron “de la Paz”. Convirtiéndose en el heredero de las coronas españolas. Sin embargo, Isabel murió al nacer Miguel, y este último al fallecer (1500), aquel deseo de tener un heredero de Manuel se hizo humo. 

Manuel I eternizó los modos de su antecesor de ideas absolutistas. Por su parte, las Cortes solo fueron convocadas tres veces durante su gestión de 25 años. Además realizó reformas en los tribunales de justicia y el sistema de tributos.

Asimismo invirtió gran parte de los recursos del país para construir iglesias y monasterios. De igual manera la construcción de misiones católicas y evangelización de nativos de sus colonias.

Falleció en 1521 y sus restos descansan en el Monasterio de los Jerónimos, que también mandó construir. Su sucesor fue su hijo Juan, quien fue llamado Juan III.