Saby Kamalich una actriz de temperamento, es de origen peruano. Ella nació en
Lima, Perú el 13 de mayo de 1939 y en la actualidad ya es ciudadana mexicana de la cual se siente muy orgullosa. Su padre fue un italiano de nombre Antonio Fantony y su madre una bella Croata.
Para los comienzos del año 1959 marcó el inicio de su primera aparición en la televisión, donde participó de la serie Bar Cristal, en su país de origen, Perú. Luego de esa participación, se le pudo ver en varias telenovelas dentro de una cadena peruana de mucho prestigio, pero su gran éxito despega desde su participación en “Simplemente María”, allá por los años de 1969.
Luego tras la búsqueda de nuevos retos y oportunidades en su carrera actoral, la actriz emigra a México y en 1972 compartió telenovelas con el actor, Braulio Castillo, con el cual tuvo una gran amistad de muchos años. Su carrera fue muy buena para ella durante todos los años 80, en la actualidad encarna personajes de manera esporádica con papeles en donde trabaja de señora de buen estatus en varias telenovelas.
Saby Kamalich siempre tuvo a su cargo el interpretar papeles de mujeres buenas, sólo hasta el 2004 en donde su participación en Gitanas sorprendió a muchos, ya que la vimos en el papel de la villana de la telenovela.
En su retorno a Perú en el año de 1983 la actriz trabajaría para Panamericana TV, dentro de la serie policial “Gamboa”. Su trabajo y participación asciende a más de 50 novelas en donde destacó por participar en: Simplemente María, Amores querer con alevosía, Tres veces Sofía, Carrusel de las Américas, y Yo no creo en los hombres. No sólo en televisión ha participado la actriz, también ingresó a las tablas teatrales en obras como: La Mentirosa, True West, Carta de Amor
Su estado en el 2011, ya con 71 años encontramos a una Saby Kamalich recién sometida a una operación de columna vertebral y que tras esta ha sufrido una serie de complicaciones cardiacas, encontrándose en la actualidad en un coma inducido, y se encuentra en la unidad de taparía intensiva pero con un pronóstico muy estable.