Ozzy Osbourne confirmó el "pacto suicida" que mantiene con su esposa Sharon, tal como había revelado en su autobiografía de 2007.
En el pacto inicial Sharon y Ozzy habían acordado que, en el caso que alguno de ellos fuera diagnosticado con la enfermedad de Alzheimer, acudirían a
Dignitas, un grupo suizo conformado por médicos y enfermeras capacitados, que ayuda y asiste a morir a personas con enfermedades terminales o que padecen problemas graves a nivel físico y mental.
Ahora, según consigna el periódico inglés
The Mirror, este compromiso se habría ampliado y ahora incluiría cualquier condición que amenazara la vida de ambos.
En las propias palabras del líder de Black Sabbath, "
Si no puedo vivir mi vida como la estoy viviendo ahora - y no me refiero a nivel económico - entonces eso es todo". "Si no puedo levantarme e ir al baño yo mismo y tengo tubos en el culo y un enema en mi garganta, he dicho a Sharon: 'Simplemente apaga la máquina'", sostiene Osbourne añadiendo: "
Si tuviera un accidente cerebrovascular y estoy paralizado no quiero estar aquí".
El músico además aseguró que llevaba 480 días sin tomar alcohol, reconociendo que sus adicciones pusieron su vida en peligro más de una vez.