David Bowie dejó a todos sus fans y admiradores un inmortal legado gracias a su arte. Pero el
duque blanco, sin embargo, no sólo era el genio ecléctico, versátil y musical que todos conocíamos. Ya que, además de su patrimonio artístico, también ha dejado una importante herencia patrimonial.
El pasado 29 de enero se abrió en la corte de Mahnattan el testamento del cantante que murió el 10 de enero del año pasado, a los 69 años de edad. El cantante pidió que sus cenizas fueron esparcidas en Bali o, si no era posible en otro lugar pero siempre de acuerdo a los rituales budistas. Aparentemente Bowie abrazó las creencias budistas ya alrededor de los años 60's.
En cuanto al valor de su patrimonio, que se estima en unos 100 millones de dólares, deberá ser repartido entre sus familiares más cercanos. De acuerdo con las disposiciones testamentarias, la mitad irá a su viuda, la ex supermodelo somalí Iman Mohamed Abdulmajid. El resto se divide entre los hijos nacidos de dos matrimonios, su hijo mayor,
Duncan Jones, que tuvo que Angela Barnett, y
Alexandria Zahra Jones, nacido en 2000. Ambos recibirán unos 25 millones cada uno.