Según lo publicado por el protal
TMZ, en las últimas semanas
Britney Spears tuvo "
varios y prolongados encuentros entre los abogados y los inspectores del caso, que estarían negociando las condiciones para devolver a la cantante el control sobre su vida".
Si bien la decisión recaerá en manos de un psiquiatra aprobado por el juzgado, que se encargará de evaluar si la cantante está preparada para llevar las riendas de su vida o no, si finalmente la decisión es positiva,
Britney no podrá recuperar el control absoluto de sus cosas. Según
TMZ, "
hay dos tipos de custodia: una sobre la persona de Britney y otra sobre sus negocios. La referente a sus asuntos de negocios continuará".