Antonio Banderas inauguró su primera exposición de fotografía, "
Secretos sobre negro", en el Instituto Cervantes de Madrid.
Protagonistas de la obra son la tauromaquia y la mujer, con la sensualidad de los rasgos latinos -morenas, labios con carmín rojo intenso y cejas negras marcadas- presentes en las 23 tomas.
Para su trabajo, el actor eligió una modelo española, una brasileña y una colombiana, quienes miran fijamente a la cámara mientras interpretan ritos universales de la tauromaquia, empuñando un estoque o moviendo un capote.
Cuando le preguntaron sobre las corridas de toros,
Banderas explicó que no se siente "
una persona muy taurina" y tampoco se considera un gran conocedor de la tauromaquia, pero tampoco se "
situaría en una posición contraria a los toros".
"
La muerte de un animal no me produce satisfacción", declaró, pero reconoció que "
la fiesta del toro sí tiene unos elementos de catarsis" que son parte la cultura española.
Por otro lado,
Antonio confesó que no pretende "
ser un fotógrafo profesional", sino que se considera un "
hombre renacentista", y que tiene a sensación de que todavía le quedan muchas cosas por hacer en su vida, sobre todo en el terreno de la solidaridad, hecho que demostró al dar a conocer que, la segunda edición de estas fotos, saldrán a subasta con un precio de salida de 685 dólares en una galería del centro de Madrid, y los fondos recaudados de las ventas serán donados a la
Fundación Solidaria Lágrimas y Favores.