Roberto Matta Echaurren Antonio Sebastián fue un pintor chileno creador de misteriosos y fantásticos entornos, identificados con el movimiento internacional surrealista.
Matta nació el 11 de noviembre de 1911 en Santiago de Chile, en una familia de origen vasco-francés, de gran alcurnia social y recursos económicos.
Completó un grado de arquitectura en la Universidad Católica de Santiago (1931) y se trasladó a París en 1933 para trabajar con el influyente arquitecto y urbanista
Le Corbusier. Trabajando en el estudio del pretigioso arquitecto,
Matta se interesó cada vez más en la pintura. Además, su amistad con los vanguardistas de varios centros europeos -
Gertrude Stein,
Marcel Duchamp,
Walter Gropius, Salvador Dalí, Federico García Lorca, André Breton y otros, estimuló su interés en el movimiento surrealista; para 1936 ya había abandonado su carrera en la arquitectura.
Su desarrollo estilístico fue rápido. En el momento en que se trasladó a la ciudad de Nueva York, a los 28 años, Matta había creado un vocabulario distintivo y visionario de formas biomórficas arremolinadas alrededor de un entorno misterioso y angustiante. Su imaginario mundo multidimensional estaba cargado de violentos conflictos y movimientos agitados.
Durante toda su vida combinó el interés de los surrealistas en el automatismo psíquico con una predilección por los elementos figurativos, vagamente atrapados en estados de flujo y crisis. Rica en ambigüedad psicológica, su obra refleja el sentido de la dislocación y la ansiedad que contribuyó al surgimiento del existencialismo, después de la Segunda Guerra Mundial.
Matta fue una importante influencia en artistas como Arshile Gorky y Robert Motherwell. Nada menos que Duchamp lo consideró "
el pintor más profundo de su generación". En los últimos años, el activismo político ocupó gran parte de sus energías. Hizo una serie de obras basadas en los escritos de
Miguel de Cervantes,
Arthur Rimbaud,
Alfred Jarry y
William Shakespeare.
En 1990, recibió el Premio Nacional de Arte; en 1992, se le otorgó el Premio Príncipe de Asturias de las Artes y, en 1995, recibió de la Asociación de Arte de Japón el premio de pintura "Praemium Imperiale".
Matta falleció en Civitavecchia (Italia) el 23 de noviembre de 2002, decretándose en su país natal tres días de duelo nacional en su honor