Como parte de un arreglo con las autoridades, los abogados de
Lindsay Lohan lograron negociar una permanencia de solo algunos minutos para su cliente en la concurrida penitenciaría de Lynwood, para así cumplir con parte de su castigo, que además incluye una semana de trabajo comunitario en la
Cruz Roja de Pomona, California, a donde fue vista llegando el jueves pasado.