Amy Winehouse cambió su radicalmente su look dejando atrás su lacia, larga y abultada cabellera por una desprolija y corta permanente.
Se pudieron ver las fotos de la cantante saliendo de su casa en Londres en varios portales de Internet, y no solo fue el cambio de su pelo, sino que también su ropa llamó bastante la atención, pues llevaba puesta una remera de red negra que dejó al descubierto su corpiño color piel y la gran cantidad de tatuajes que tiene en el torso.