Tal y como era de esperarse, la joven pareja real eligió a sus familiares más cercanos para que ocupen el lugar de padrinos en su boda, que se realizará el próximo mes de abril.
Mientras que el príncipe
William eligió a
Harry, su hermano menor, se suppo que la principal dama de honor de la novia será su hermana
Philippa, menor que
Kate.
También se conocieron los nombres de las otras damas de honor, que serán
Lady Louise Windsor, de 7 años, hija de los Condes de Wessex;
Margarita Armstrong-Jones, de 8 años, hija de los Condes Linley;
Grace van Cutsem, de 3 años, hija de
Hugh van Cutsem, amigo cercano de la pareja, y
Eliza Lopes, de tres años y nieta de la
Duquesa de Cornualles, y los de los pajes del enlace, que serán
William Lowther-Pinkerton, de 10 años, e hijo de la secretaria privada del príncipe
William, y
Tom Pettifer, de 8, hijo de la ex niñera de los príncipes
William y Henry,
Tiggy Legge-Bourke.
Se supo además que los gastos de la boda real podrían superar los US$80 millones, aunque en los últimos días la Casa Real y los padres de la novia anunciaron que solventarán el servicio, la recepción y la luna de miel, debido a la grave crisis económica que atraviesa el país.
Por otro lado, autoridades del Palacio de St. James revelaron que la novia romperá con las estrictas convenciones reales, y en vez de ir en carruaje irá en auto a su boda en Westminster, donde desde hace más de 1000 años son coronados los reyes de Inglaterra.
La boda será oficiada por el Arzobispo de Canterbury,
Rowan Williams, y posteriormente la reina Isabel II ofrecerá una recepcuión en el Palacio de Buckingham.