A los 45 años,
Victoria Beckham finalmente adquirió esa seguridad sobre su cuerpo que, le faltaba en sus días de escuela primaria, cuando era intimidada sistemáticamente, también debido a su apariencia física. "
En aquellos días yo era una niña delgada de ocho años con trenzas, una cara amarillenta y un espacio entre los dientes por el que podía pasar un guisante", dice la ex Spice Girls, ahora diseñadora, en una entrevista con Glamour UK en su edición de colección otoño / invierno. "
Era realmente horrible y nunca me acostumbré". Sin embargo, a partir de esa experiencia negativa, Beckham se ha fortalecido ("
ahora tengo la piel más curtida", admite) y esto le permitió compartir lo que había experimentado con su hija menor
Harper, que ahora tiene exactamente la misma edad que ella tenía entonces.
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En la escuela me acosaron tanto mental como físicamente, continúa Posh, y por lo tanto puedo usar estas experiencias mías para hablar sobre esto con Harper y explicarle que las chicas siempre deben ser amables con otras chicas". En otra parte de la entrevista, Victoria abordó el tema relacionado con sus hábitos alimenticios, por lo que fue criticada en el pasado, dada su delgadez excesiva. "
Cuando tienes hijos, tienes que poner muchas cosas en perspectiva, explica la esposa del ex campeón del Manchester United, porque te das cuenta de que se dan cuenta de todo". Como resultado, "
nunca me sentaría a la mesa con mis hijos sin comer u omitir una comida, porque necesitan ver que su madre está comiendo saludablemente".