La estrella del pop californiana
Katy Perry, juez del histórico concurso de talentos American Idol, ve el vaso medio lleno. Para la cantante, gracias al largo período de aislamiento forzoso, muchas personas están reflexionando sobre sí mismas y persiguiendo aún más sueños que hasta ahora creían tener encerrados en un cajón.
Invitado a
Live with Kelly & Ryan junto con los otros dos jueces del certamen
Lionel Richie y Luke Bryan, la cantante explicó por qué esta nueva edición será tan diferente a las demás. "
Estamos pasando por un momento extraño, loco y absurdo en el que muchos de nuestros sueños han quedado en suspenso", dijo Katy. El ejemplo perfecto es el talent show American Idol, que arranca con la nueva edición el día de San Valentín y en el que la diva hace el papel de juez.
“
Creo que muchos de los asistentes pensaron, cuando hicieron clic en el enlace de las audiciones: 'No tengo nada que perder porque nada se da por sentado'. No sabemos lo que nos depara el futuro. Dejemos que sucedan las cosas, es mejor lanzarse y perseguir tus sueños". La estrella agrega: “El programa sigue mejorando cada vez más. Creo que la gente [en la industria] confía en nosotros. Me refiero a los artistas y en particular a los verdaderos músicos, no solo a los grandes cantantes sino a toda la gente del entorno”.
Perry finalmente agregó: "
Y esto es lo que define a un American Idol, ¡de hecho no se le llama American Singer!". La cantante comenzó a filmar para la nueva edición del show de talentos solo cinco semanas después de dar a luz a su primera hija Daisy, que tuvo con el actor
Orlando Bloom. Una estrella del pop internacional que ha demostrado toda la fuerza que puede tener una nueva madre.